Para nadie es un secreto que en Estados Unidos se toman muy en serio sus festividades. Desde el banquete de Acción de Gracias hasta los juegos pirotécnicos del 4 de julio, este país es conocido por acoger e incluso mejorar las tradiciones. La excepción a la regla no podía ser la celebración más espeluznante del año: ¡Halloween! El 31 de octubre de cada año llega Halloween, una celebración muy esperada tanto por niños como por adultos. Entre películas de terror, casas embrujadas, paseos en carros alegóricos, laberintos dentro de cultivos de maíz, juegos tradicionales, figuras talladas en calabazas, deliciosos dulces, fiestas de disfraces y pedir dulces, Halloween es uno de los eventos más planeados de todo el año. ¡Y de los más costosos! La gente se toma muy en serio el salir y mostrar su lado más espeluznante y creativo de Halloween. Por ejemplo, ¿sabías que la cuarta parte de todos los dulces que se venden por año en los Estados Unidos se compra sólo para Halloween? ¡Eso es mucho azúcar! Entonces, volviendo al principio, ¿qué es Halloween exactamente? Nos alegra que lo hayas preguntado.
Los Orígenes
Halloween proviene de los celtas, un pueblo que vivió hace 2.000 años en el área que hoy es Irlanda, Reino Unido y el norte de Francia. Cada primero de noviembre, los celtas celebraban el comienzo de su nuevo año con el festival de Samhain. Este día marcaba el final del verano y la cosecha, y el inicio de la oscuridad y del frío invierno; una época del año que regularmente se relaciona con la muerte. Los celtas creían que la noche antes del año nuevo, la frontera entre el mundo de los vivos y el de los muertos se desvanecía. Y así, se pensaba, que en la noche del 31 de octubre, los fantasmas de los muertos regresaban a la tierra. Además, creían que más allá de sólo causar problemas y dañar los cultivos, la presencia de espíritus de otro mundo ayudaban a sus sacerdotes a predecir el futuro de una manera más fácil. Estas profecías fueron un recurso importante durante los largos y oscuros inviernos para la tranquilidad y guía del pueblo celta, después de todo, dependían por completo de la inestable naturaleza. Es así que para conmemorar este día, los sacerdotes celtas construían enormes fogatas sagradas, donde el pueblo se reunía a quemar cultivos y animales como sacrificio a sus deidades. Durante la celebración, los celtas vestían disfraces, hechos con cabezas y pieles de animales, y predecían la suerte de unos y otros. Cuando la ceremonia terminaba, traían antorchas a la fogata y cada uno llevaba una parte de la llama sagrada a su casa. Una vez allí, encendían el fuego de sus hogares y guardaban la esperanza de que las deidades los protegieran durante el largo y oscuro invierno que se avecinaba.
El Día de Todos los Santos
Durante el siglo IX, la influencia del Cristianismo se desplegó en tierras celtas, donde sus antiguas tradiciones lentamente se mezclaron y remplazaron. Aproximadamente en el año 1000 D. C; la iglesia declaró el primero de noviembre como el Día de Todos los Santos en honor a los muertos. El concepto de este día era similar al festival Samhain de los celtas, en ambos casos, se celebraba con grandes fogatas, desfiles y disfraces (la mayoría de santos, ángeles o demonios). La celebración del Día de Todos los Santos también se llamó All-hallows o All-hallowmas, derivado del inglés medio Alholowmesse; y la noche antes, la tradicional noche de Samhain en la región celta, se empezó a llamar la víspera de All-Hallows, y con el tiempo, Halloween.
Halloween ll****ega a Estados Unidos
La historia de Halloween continúa en la época colonial de Nueva Inglaterra, donde las celebraciones se limitaban al estricto sistema de creencia protestante. En los inicios de Estados Unidos, era más común que se celebrara Halloween en Maryland y las colonias del sur. Las primeras celebraciones incluían fiestas, eventos públicos para festejar la cosecha y compartir historias sobre muertos a través de canciones y bailes. Las festividades de Halloween en la colonia también incluían narraciones e historias de travesuras fantasmales, y mientras que en este punto, las celebraciones de otoño eran comunes, no fue hasta la segunda mitad del siglo XIX que Estados Unidos se llenó de nuevos inmigrantes, y las macabras y famosas celebraciones de Halloween tomaron fuerza.
Trick-or-Treat
Inspirados por los inmigrantes procedentes de Irlanda e Inglaterra, los estadounidenses empezaron a usar disfraces para ir de casa en casa pidiendo comida o dinero, una práctica que hoy se conoce como “trick-or-treat.” A finales de 1800, en Estados Unidos hubo un consenso para que Halloween fuera una festividad centrada en la comunidad y las reuniones entre vecinos; en vez de fantasmas, bromas y la “brujería” siempre presente en el siglo XIX. Es así como en el cambio de siglo, las fiestas de Halloween para niños y adultos se convirtieron en la forma más común de celebrar el día, con eventos de juegos, comidas de temporada y disfraces alegres. Los líderes de la comunidad pidieron a las familias que eliminaran cualquier manifestación “grotesca” o “aterradora” de sus celebraciones de Halloween, dando como resultado la pérdida de los matices supersticiosos y religiosos de dicha festividad para inicios del siglo XX.
Celebraciones de Halloween
Avanzando rápidamente a los años de 1920 y 1930, Halloween en los Estados Unidos se convirtió en una festividad laica enfocada en la comunidad, con desfiles y fiestas como sus eventos principales en toda la ciudad. Debido al incremento en el número de niños después del “baby boom” de la década de 1950, las celebraciones de Halloween de mediados de siglo, se dedicaron en su mayoría a los más jóvenes. Trick-or-treating fue una forma nueva y divertida en la que vecinos y amigos celebraban mientras cuidaban mutuamente de sus niños. Hoy, trick-or-treating es tal vez la actividad más popular para festejar Halloween en los Estados Unidos. Con un gasto estimado de seis mil millones de dólares al año, Halloween es considerada la segunda festividad comercial más grande del país después de Navidad. Por supuesto, hay distintas maneras de celebrar Halloween sin ir de puerta en puerta, las fiestas de disfraces son un ejemplo. Las fiestas de Halloween, cada vez más populares entre adultos, son una forma excelente de reunir amigos, compañeros de trabajo y vecinos para compartir el respeto por las tradiciones clásicas de Halloween e incluso crear nuevas formas de celebrarlo.
Disfraces de Halloween
Ahora que conoces la historia del Halloween en los Estados Unidos, ¿cuál es la mejor manera de celebrarlo? Ponerte disfraz es imprescindible, así demuestras de manera instantánea que honras las tradiciones de la festividad y también es un modo divertido de mostrar tu creatividad. Buscar ideas de disfraz para Halloween es fácil; los estadounidenses se visten de cualquier cosa desde animales a comidas, de monumentos a celebridades, de personajes de caricatura a escritores, de objetos inanimados a juegos de palabras. Cualquiera que sea tu elección para disfrazarte se valorará por el tiempo y la energía que le pongas al disfraz, y si asistes a una fiesta de Halloween, asegúrate de revisar si los anfitriones establecieron un tema en específico. En las fiestas de Halloween temáticas los invitados son parte de un ambiente creativo, donde todos llevan un disfraz que hace parte de un concepto más amplio. Por ejemplo, en una fiesta temática de Super Mario habría invitados disfrazados como varios de los personajes del juego y una de Harry Potter tendría disfraces de los diferentes estudiantes de Hogwarts. Y así, podríamos seguir y seguir. En Estados Unidos no importa cómo decidas celebrar Halloween, sólo mantente a salvo, haz amigos y diviértete. ¡Ah, y come muchos, muchos dulces!